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Isla
de Margarita, Venezuela
8 de Diciembre de 2005
Sol De Margarita
Jazz con
sabor margariteño
* Saúl Vera, Biella Da Costa, Junior Romero, Gerry Weil, Paoli Mejías y Luis
Salinas, se unieron a los regionales Sergio Gallardo, Jorge Bustos y a la
orquesta Sinfónica Juvenil de Nueva Esparta, para ofrecer lo mejor de esta
música cargada de improvisación, durante tres noches llenas de sabor latino.
El jazz se convirtió en el ritmo más escuchado durante los días 24, 25 y 26
de noviembre en Margarita, el lugar de encuentro era la carpa de Rattan
Plaza, desde donde la música se dejaba colar hacia la transitada avenida
Jóvito Villalba, para atraer como encantados a muchos de los que pasaban por
el lugar.
Tres días de buena música, ambiente especial y mucho sabor latino, así fue
primer Festival de Jazz en Margarita, evento llamado a conquistar a las
personas que sienten placer al escuchan este género cargado de improvisación
que hoy goza de aceptación universal.
Margarita era de las pocas islas del caribe que no contaba con un
espectáculo de esta calidad, que ahora se hizo realidad con la participación
de músicos de la talla de Saúl Vera, Biella da Costa, Junior Romero, Gerry
Weil, el nominado al Grammy Paoli Mejías, Huáscar Barradas y Luis Salinas,
quienes se unieron a los regionales Sergio Gallardo, Jorge Bustos y a la
orquesta Sinfónica Juvenil de Nueva Esparta para brindar la excelencia que
los caracteriza.
Huáscar Barradas con su flauta, Biella Da Costa con su voz y Paoli Mejías
con sus manos que acaricia la percusión, hicieron un alto en la música para
dedicar unos minutos a la
GENTE
FELIZ y expresar con palabras algunas de sus percepciones más íntimas.
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Paolí Mejías: música con sabor a mundo
Paoli Mejías hace música que suena a mundo. No sólo porque comparte la idea
de que la música es universal, sino porque incorpora a su menú ritmos de
regiones diversas y da forma, con su curiosidad cadenciosa, a la sazón única
y distintiva que le caracteriza.
Tan apreciable como su talento fue la humildad que desbordó sobre el
escenario del festival. Con ambos hizo enmudecer y levantar en pleno de sus
asientos al público, que se deshizo en aplausos ante la pasión que imprime
con cada golpe fugaz a sus tambores -no en vano su más reciente producción
está nominada a los Grammy latinos y es una de las 25 posibles candidatas al
Grammy norteamericano.
La energía fue máxima cuando piano y bongoes sostuvieron un diálogo sonoro,
pues la destreza del pianista cubano Yan Carlos Artime sorprendió a cuantos
disfrutaron esta sensible presentación. Junto con ellos, Ricardo Pons en el
saxofón; el bajista Gabriel Rodríguez y Efraín Martínez en la batería,
completaron un quinteto de excelentes intérpretes acompañado al final por
nuestro talentoso músico local Sergio Gallardo, el “Gato”, quien sumó un
vivaz solo de timbales al frenético ritmo del conjunto.
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¿A qué sabe la música de Paoli Mejías?
- Mira, yo creo que el sabor es bien distinto a lo que la gente ha oído
antes como percusionista. Los grupos casi siempre tocan más afrocubana jazz
o un jazz más inclinado al mambo, que viene derivado de la salsa. Lo que
propongo no se limita solamente al mambo o a la salsa o a la música
afrocubana, sino está más en una propuesta que llaman worldmusic.
¿Cómo preparaste esta producción que ha resultado tan exitosa?
- Mi manager es mi esposa, Sara Vogel que es mi todo, la que hace todo y yo
soy el que hago mi música con la ayuda de mis músicos. Yo sólo tengo buena
música, pero para que le llegue al público se necesitan unos recursos de
promoción que yo no tuve. Y me siento super orgulloso porque la gente que
votó por mi disco no lo hizo porque yo soy una figura super reconocida, sino
porque de verdad les gustó la música.
Después del Grammy qué
- Ya mi mente está concentrada en mi próxima producción. Estoy buscando
elementos bien desconocidos en la música. Música de Grecia, música flamenca,
música puertorriqueña. Hacer fusiones totalmente diferentes. No puedo decir
que yo me inventé nada. Todo está inventado, pero sí te puedo decir que
estoy tratando de inventar elementos que las otras personas no se les ha
ocurrido utilizar, para que a la gente le suene diferente.
¿Cuándo se encendió esa chispa de curiosidad por los sonidos desconocidos?
- En Puerto Rico, igual que aquí todo el mundo toca tambores y baila. Eso
viene en la sangre. Pero yo siempre tuve esa inquietud por los tambores. Yo
de verdad me empecé a inclinar por conocer más música del mundo cuando
empecé a viajar con Eddie Palmieri por todas partes y empecé a conocer gente
que me ponía a escuchar la música de su lugar.
O sea que en el fondo todo el mundo suena a Paoli Mejías
- Exacto, porque yo saco un poco de ese jugo que tiene cada cultura, de su
sabor y trato de ver cómo yo a mi manera lo puedo ir empleando. Y no
necesariamente tengo que hacer lo que se hace en ese folklore, pero puedo
coger un poco, porque la música es universal y es infinita. Yo tendría que
vivir mucha vida para poder conocer toda la música que existe.
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